Zanjas y Camellones

Con las características geológicas de esta Sabana de Bogotá -o, realmente, valle del Bogotá- una antigua laguna, siempre dispuesta a la inundación y con zonas que conservan todo el año un alto nivel freático, trabajaron los habitantes de la Sabana, del periodo Herrera a los Muiscas, para hacer un sistema de zanjas y camellones que se extiende en toda la planicie aluvial. En un lapso que se calcula de 2000 a 3000 años, levantaron una red de zanjas y camellones que va de Guaymaral a Soacha, sistema que permitía dirigir la inundación, mantener la cría de peces y animales de agua, y sembrar en las áreas anegadas. 

Áreas con camellones identificadas mediante la fotointerpretación. Lorena R. Gallo, https://revistascientificas.us.es/index.php/spal/article/view/8082/7515

De hecho, la base de la alimentación muisca está conformada principalmente por el pez capitán que se criaba en las zanjas y el maíz que se sembraba en los camellones. Y hasta hace poco de allí se sacaban también frutas, fríjoles, quinua, arracacha, cubios, papas, además de guapuchas, cangrejos, patos y cuyes. 

Este sistema de cultivo, compartido por muchas naciones de América, fue ignorado por criollos y españoles desde los primeros años de la Colonia. Como dice la arqueóloga Lorena Rodríguez: “Desde la perspectiva española, era impensable que una  civilización pudiera florecer en el agua”. Más aún en humedales, que de hecho hasta hace muy poco llamábamos simplemente pantanos. 

Y, así, solo hasta mediados del siglo XX los redescubrió la academia, y comenzaron a estudiarse. En 1960 la antropóloga Sylvia Broadbent reconoció sus huellas en unas fotografías aéreas que tomara en la década del 40 y 50 el Instituto Geográfico Agustín Codazzi. Eran huellas similares a las de los sistemas del río Sinú y La Mojana, y de otros países de América, como las Chinampas en México, o los camellones del Titicaca en Perú.

Camellones muiscas aún visibles en el humedal Jaboque, curvos y rectos, febrero 2022. Foto María Buenaventura

Y aunque la academia los recuperó de su propio olvido, al preguntar por el pez capitán a la abuela Blanca Nieves Ospina, sabia muisca de Suba, nos dimos cuenta de que ella y su familia nunca habían olvidado esta relación con el agua. Nos contó de las zanjas en la Suba de su infancia, en la década de los 60. En las zanjas grandes pescaban capitán, guapuchas y cangrejos. 

Siguiendo estas memorias vivas, el colectivo zanjas y camellones, propone reconstruir, a modo de aula viva también, un fragmento de aquel paisaje situado entre tierra y agua, en una área pequeña del predio Las Mercedes cercana al humedal La Conejera, área que justamente conserva hoy un alto nivel freático, la característica más importante para dar vida a esta reconstrucción. 

Los camellones de Las Mercedes, observaciones en archivo y terreno.  

Según los estudios que hemos realizado en archivo, y en terreno, de la mano de la historiadora y arqueóloga Lorena Rodriguez Gallo, una de las personas que más ha estudiado los camellones de la Sabana de Bogotá, precisamos que en el predio Las Mercedes hay camellones delgados, ubicados al nororiente del Bosque Las Mercedes, y unos más anchos y largos hacia la zona del Humedal La Conejera. 

Evidencia de huellas de los antiguos camellones en el Humedal La Conejera, Suba. Detalle de aerofotografía IGAC, vuelo C773-130, realizado en 1956.

Evidencia de huellas de los antiguos camellones en damero, Hacienda Las Mercedes, Suba, cerca al Humedal. Detalle de aerofotografía IGAC, vuelo C773-129, realizado en 1956.

1956 IGAC. Vuelo C769 – 045 Al centro: Huella de antiguos camellones en la Hacienda Las Mercedes, al occidente del brazo principal de La Conejera. Estos camellones fueron estudiados por Ana Maria Boada.

Caracterización Camellones, según Ana Maria Boada, 2006. Fotografía y citas del libro: Ana María Boada Rivas, Patrones de asentamiento regional y sistemas de agricultura intensiva en Cota y Suba, Sabana de Bogotá (Colombia), Fundación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales Banco de la República, Bogotá, 2006.

Según conversaciones con Ana María Boada, quien realizó las excavaciones en los camellones del sector de Suba, de la hacienda El Escritorio, Las Mercedes, La Conejera y Guaymaral, de 2002 a 2006, solo dos columnas de polen arrojaron resultados: una de Guaymaral y la otra del norte de la Conejera. Las columnas extraídas de los camellones en Las Mercedes, tal vez debido a la alta humedad del sector, no conservaban polen analizable. Sería deseable en un futuro, realizar estudios de fitolitos, pues la palinografía no parece arrojar resultados satisfactorios en Las Mercedes. 

Ubicación del proyecto, aerofotografías, planos con medidas y diseños. 

El área para hacer las zanjas y camellones es zona colindante con el brazo del humedal La Conejera, zona inundable de difícil adecuación para formas de siembra diferentes a este sistema.

Dentro de esta área, alrededor del camino de agua principal, se proyecta la zona de camellones. Ubicación del proyecto con google earth, 4º45’52, 74º05’59

Sobreposición vista actual de google earth y aerofotografía del IGAC 1956, Vuelo 773-131. Como se observa en la fotografía antigua, el área colindaba en 1956 con una laguna, seguramente (por su forma) formada artificialmente, aprovechando el nivel freático de la zona. PREDIO LAS MERCEDES – Jardín Botánico de Bogotá.

Fotografía Dron, Diego Bermúdez, identificación del lugar para recrear los camellones. Las Mercedes, Suba, abril, 2022

Una vez obtenido el permiso del Jardín Botánico de Bogotá, para recrear los camellones en el lugar, solicitamos a la abuela Blanca Nieves Ospina, sabia muisca de Suba, hija de la gran quebrada La Salitrosa, su intervención para pedir permiso al lugar, ritual que hicimos el 9 de abril de 2022.

Abuela Blanca Nieves Ospina, Las Mercedes, abril 2022, foto Juan Ruy Castaño.

Fotografía Dron Diego Bermúdez. Delimitación del área alrededor de la huella del canal, según nivel freático, cada tutor está ubicado a una distancia de 7 metros.

Para definir el lugar y diseño adecuado de los camellones, realizamos el siguiente proceso:

Delimitación del área alrededor de la huella del canal, según nivel freático, con apiques marcados con tutores ubicados a una distancia de 7 metros cada uno. 

Se precisó en terreno el nivel freático del lugar, a partir de apiques de 70 cms de profundidad. Incluso en periodo de pocas lluvias brota agua a 50 y 60 cms. En el lugar no hay material que evidencia la presencia de rellenos, toda la capa encontrada fue de suelo orgánico. 

Sin embargo, teniendo conocimiento de que esta zona ha sido intervenida por las antiguas haciendas, en caso de encontrar escombros vamos a embolsar y a disponer en lugares autorizados de la ciudad, para esos trabajos contamos normalmente con el apoyo de la empresa LAM SAS.

Asesorías: estudio de suelos de la Van der Hammen, y específicamente en el área a intervenir en Las Mercedes, con Sergio Gaviria. Para el diseño de los camellones: Alexander Hassidoff, ingeniero hidráulico.

Etapas Intervención

Etapa 1 junio a julio: Camellón largo, con zanja que sigue el curso del agua. Área del camellón: 10 metros x 3 metros. Altura: 1 metro a 1.20 metros. Zanjas de 1.50 metros de ancho.

Área piloto a intervenir inicialmente: 13 x 6 metros. Dibujos Diego Bermúdez, 2022.

El material de suelo orgánico que sale de allí se dispone sobre el área de camellones, para elevar su altura, según la tecnología tradicional. El camellón se levanta en 2 a 3 jornadas de trabajo. Se siembra en 2 jornadas. Se estudia su estabilidad y mantenimiento durante un mes, para continuar entonces con las otras etapas.

En jornada de junio, en un ritual grupal, comenzamos a descubrir el agua escondida en el kikuyo:

Primer trabajo grupal, ritual de permiso y comienzo del primer canal, junio 2022. Fotografías Gabriela Molano.

Escritura de los camellones en la tierra, primer camellón levantado por Guido Caicedo, Jesús Larrota y Juan Rodríguez, 3 de julio de 2022, Fotografía María Buenaventura.

Siembra del primer camellón, agosto 2022, fotografía Sergio Durán.

Fotografía Dron Diego Piñeros, agosto 2022. El curso de agua sigue su trayecto natural hacia el humedal La Conejera.

Finalmente ampliamos la zona de los camellones y añadimos desviaciones según el curso del agua.

Fotografía dron Diego Piñeros, enero 2023.

Imágenes actuales Google Maps: https://www.google.com/maps/@4.7639284,-74.1021709,891m/data=!3m1!1e3?entry=ttu

Visita a los camellones, febrero 2024, Fotografía Comunidad de La Pala, compartida por Sabina Rodríguez.

En este tiempo de sequía los canales de agua lluvia se secan, es el momento de recoger los lodos de las zanjas y ponerlos sobre los camellones para fertilizar. Actualmente las zanjas y camellones, como todo el complejo del bosque Las Mercedes, están bajo el cuidado del Jardín Botánico den Bogotá.

Sobre este proceso publicamos el libro: Mihique || Suna gue || Caminos de agua, que hace parte de la colección de Proyectos de investigación en tecnologías y ancestralidad, de la Línea estratégica de Arte, Ciencia y Tecnología de Idartes. Próximo a salir en línea.

Autores e integrantes del Colectivo: Alejandro Bernal, Ana Sabina Rodríguez van der Hammen, Blanca Nieves Ospina, Diego Bermúdez, Diego Martínez Celis, Guido Caicedo, Jesús Larrota, Juan Rodríguez, Juliana Steiner, Leonel Vásquez, Liliana Novoa Rodríguez, Lorena Rodríguez Gallo, María Buenaventura, Milena Camacho.

Más información en la página del colectivo Zanjas y Camellones

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